Nuestra ciudad seria la escogida por Francis Ford Coppola y
Martin Scorsese para rodar El Padrino IV. O eso es lo que cree el fiscal
anticorrupción, Fernando Bermejo, el cual ha ilustrado su informe final
afirmando que la trama de extorsión del caso de los macroprostíbulos de Castelldefels,
Riviera y Saratoga, actuaban "al más puro estilo de las películas El
Padrino, Casino o Uno de los nuestros”.
El juicio, que se celebra en la Audiencia de Barcelona
desde septiembre, acusa a los ex-mandos del Cuerpo Nacional de Policía Andrés
O. y Luis G. de extorsionar a los propietarios de los macroprostibulos para evitar
inspecciones en los burdeles y ser avisados antes de realizar redadas, dándoles
tiempo a esconder a las prostitutas en situación irregular y menores.
Según la acusación, los acusados recibían presuntamente desde
el año 2002, 6.000 euros mensuales camuflados en un coche que recogían en un
concesionario de Martorell (Barcelona) regentado por Manuel G.C., confidente y
testigo clave del caso. Posteriormente, el inspector de Policía Javier M. P.
quiso subirse al carro exigiendo presuntamente 3.000 euros al mes.
En total, el fiscal solicita hasta 44 años de cárcel para
los seis miembros del Cuerpo Nacional de Policía, tres abogados, un funcionario
del Ayuntamiento de Barcelona, un ingeniero y los responsables de los locales
de alterne, acusándolos de los presuntos delitos de favorecimiento de la prostitución,
contra los derechos de los trabajadores, pertenencia a organización criminal,
asociación ilícita para delinquir, cohecho pasivo, revelación de secretos,
omisión del deber, aprovechamiento y revelación de información privilegiada,
falsificación de documentación oficial y extorsión, entre otros.
Además mantiene la petición para los propietarios y
encargados de los clubes de 7 a
18 años de cárcel; para los policías de 16 a 44 años; para los abogados de 5 a 20; 19 para el funcionario
municipal y 20 para el ingeniero, además del cierre definitivo de los
prostíbulos y disolución de sus sociedades. (Europa Press)
