Según informan los Mossos d´Escuadra, esta pasada semana han
sido detenidas 16 personas por formar parte de una banda de presuntos falsificadores
de joyas que se dedicaban a su posterior venta en establecimiento de
compraventa de oro y en joyerías.
La banda estaba compuesta por cuatro italianos y dirigida
por un napolitano de 55 años con antecedentes por tráfico de drogas, atracos y
extorsión y de pertenencia a la mafia napolitana. Lo acompañaban en sus tareas
de dirección un napolitano de 48 años y sus dos hijos, todos ellos residentes
en Castelldefels y Gavá.
Los 14 vendedores arrestados, los cuales eran vecinos de Castelldefels,
Gavá y Barcelona y a los que no se les conoce actividad criminal previa ni
antecedentes, centraban su actividad en la ciudad Condal por la gran cantidad
de establecimientos especializados en la compraventa de joyas y joyerías, quedando
en libertad con cargos tras declarar en el Juzgado de Instrucción 12 de
Barcelona. De la cúpula de la banda solo han ingresado en prisión el captador
de origen peruano y uno de sus miembros, el resto, entre los que se encuentran
el jefe y sus hijos, están en Italia a la espera de ser detenidos.