Tras perder la votación para la adjudicación del nuevo
sistema de limpieza de la ciudad, el alcalde de Castelldefels, Manuel Reyes,
propuso durante el pleno municipal celebrado el pasado 26 de junio, la creación
de una comisión, formada por todos los grupos políticos, para estudiar y
aclarar la situación laboral del personal de limpieza que subrogue la ganadora
del concurso, CESPA.
En el escrito, la empresa aclara algunas dudas suscitadas
respecto al mantenimiento de la actual plantilla de trabajadores adscritos a
este servicio al que quiere asegurar que "garantiza todos los puestos de
trabajo de todo el personal subrogado". Del mismo modo, la empresa quiere
poner de manifiesto "el cumplimiento de las obligaciones de Cespa en
garantizar tanto, los derechos de los trabajadores subrogados como en el del
mantenimiento de los puestos de trabajo actuales para la prestación del nuevo
servicio en el municipio de Castelldefels".
Reyes recordó que el concurso de la adjudicación de este
servicio no puede queda desierto y que el ayuntamiento está en la obligación de
licitarlo una vez ha recibido el visto bueno de la mesa técnica de contratación
que evaluó las propuestas presentadas a concurso. El incumplimiento del mismo
puede suponer una demanda contra el ayuntamiento por parte de la empresa
ganadora del concurso por un millón de euros.