Tras la recogida de más de
500 firmas contra la tercera fase del Paseo Marítimo y varias reuniones entre
los vecinos del barrio de Baixador de la Playa de Castelldefels y el
ayuntamiento de la ciudad, el consistorio renuncia al modelo proyectado de
chiringuitos fijos en primera línea de mar, los cuales hubieran quedado a
escasos 10 metros de las viviendas con el consiguiente perjuicio para los
vecinos. En su lugar, el ayuntamiento propone dar un uso de ocio y descanso a
las 4 plataformas ya que el proyecto está adjudicado y deben iniciarse,
supuestamente, las obras en menos de un mes.
Las declaraciones del
concejal de Gobernación y Vía Pública de Castelldefels, David Solé "definitivamente
no habrá chiringuitos fijos en el tercer tramo del paseo marítimo" y su
compromiso de que las plataformas tengan forma de grada que bajen hasta la
arena para así no poderse instalar ningún chiringuito, no han mitigado la
desconfianza de la plataforma vecinal, Stop III fase del paseo marítimo, los
cuales piden que se eliminen las cuatro plataformas del proyecto y un debate ciudadano
sobre el futuro plan de usos de la playa
La decisión del consistorio
de no instalar los 4 chiringuitos proyectados inicialmente, viene dada por no
tener que realizar la inversión de un millón de euros al que se había comprometido
en un principio, tras la reducción del presupuesto en un 75%, siendo sustituida
por una aportación económica, pendiente de cifrar, que repercutirá en el
mobiliario urbano, arbolado y alumbrado a colocar en el tramo de la 3ª fase del
Paseo Marítimo.
