La
intensa lluvia y el granizo que se precipitó ayer entre
Castelldefels y Sitges a las 23 horas interrumpió el tráfico de la
C-32 y algunos coches permanecieron atrapados.
Según
el Servicio Meteorológico de Catalunya, en apenas media hora cayeron
más de 50 litros por metro cuadrado en Castelldefels. La lluvia,
acompañada de fuerte granizo, afectó a la normal circulación de
los vehículos por la autopista que une Castelldefels y Sitges y la
empresa concesionaria Abertis se vio obligada a emplear máquinas
quitanieves para normalizar de nuevo el tránsito.
A la
medianoche el granizo también obligó a cerrar la circulación en la
C-31 a la altura de Sitges y Protección Civil pidió precaución a
los conductores durante toda la madrugada.
El
Servicio Meteorológico de Catalunya prevé precipitaciones débiles
y dispersas en cualquier punto del territorio hasta mediodía,
sobretodo en el litoral y el pre-litoral, donde podrían alargarse
hasta media tarde. La probabilidad de granizo es mínima en toda
Catalunya así que no se volverán a repetir los episodios vividos
ayer.