miércoles, 27 de febrero de 2013

Finalizan las declaraciones de los implicados en el caso de corrupción urbanística de Castelldefels

La Guardia Civil acusó, el pasado mes de enero, al ex alcalde socialista, Agustín Marina, a dos ex cargos municipales y a un empresario local, de amasar una fortuna con un urbanismo a medida durante los 23 años que estuvo al frente del ayuntamiento de Castelldefels, lo que pudo haber causado un perjuicio económico de 15 millones de euros a las arcas municipales. El caso se destapó a raíz de una documentación anónima que recibió el actual Alcalde de la ciudad, el Popular Manuel Reyes, que apuntaba a tráfico de influencias, malversación de fondos, blanqueo de capitales y delito societario.

El primero en pasar por el juzgado nº 8 de Gavá fue el Ex Alcalde de Castelldefels, Agustín Marina, el cual declaró que “todos es falso” y que es “victima de un montaje político”, “Mi cliente es víctima de un linchamiento” aseveró su abogado.

El ex arquitecto municipal, Antoni Gomà, negó en su declaración que mientras estuvo en el cargo se produjeran actividades urbanísticas irregulares en el consistorio y que se haya enriquecido personalmente con actividades irregulares.
Gomà aseguró que "Todo lo que tengo lo he conseguido trabajando desde 1972" que está "muy tranquilo" y confía en que el caso acabará archivándose. El ex arquitecto considera que el informe policial en el que se basa el caso está "lleno de errores" y que todo forma parte de "un acoso político".

La directora gerente de Castelldefels Projeccions y ex mujer del también implicado ex arquitecto municipal, Antoni Gomà, María Dolores Irún, ha sido este pasado viernes la última en declarar, descartando de forma rotunda haber cometido ni uno solo de los delitos que la Guardia Civil le atribuye.
Las permutas de terrenos, las recalificaciones y las ampliaciones de capital, por ejemplo, ligados a la sociedad municipal Castelldefels Projeccions no son a sus ojos delitos como presupone la investigación policial. "El urbanismo no es delito», ha comentado la mujer, quien afirma haber demostrado que su amplio patrimonio lo ha reunido a través de operaciones totalmente legales.
La directora gerente de Castelldefels Projeccions fue despedida por el consistorio al descubrir que simultaneaba su labor al frente de la empresa pública, con una intensa actividad al frente de varias empresas que siempre terminaban teniendo relación con los proyectos que ella misma impulsaba desde el Ayuntamiento.
Tras su despido, Irún presentó una denuncia contra el consistorio por despido improcedente.

El caso queda ahora a la espera de que el juez decida si llama a declarar a alguien más.